HONESTOS SONETOS- LUCHA INTERNA

 

LUCHA INTERNA.

 

 

 

En el interior de cada uno habita

el mejor aliado, y el peor enemigo,

ambos comparten idéntico abrigo,

pero uno ayuda, y el otro debilita.

 

Quien confía en su capacidad personal

sin caer en la propia desconfianza,

no necesita, de otros, ninguna alabanza,

para conocer su auténtico potencial.

 

Cuando uno mismo es el adversario

cualquier batalla acaba siendo injusta,

mientras se vive en el fracaso rutinario.

 

Saber imponer de una manera robusta

un sentimiento positivo mayoritario,

aleja el pesimismo que siempre asusta.

HONESTOS SONETOS- EL CAMINO DESVIADO

 

EL CAMINO DESVIADO.

 

 

 

La búsqueda permanente de la felicidad

debería ser el principal objetivo,

pero pocos la encuentran con facilidad,

incluso alguno adopta un rol negativo.

 

Cuando alguien logra sentirse feliz

todo lo ve bajo otro punto de vista,

tener su disfrute como única directriz

es la mejor opción para un optimista.

 

Aun siendo el destino más perseguido,

alcanzarlo no siempre resulta sencillo

por culpa de las propias incoherencias;

 

a pesar de haber muchas buenas influencias

seguir el liderato de un nefasto caudillo

consigue alejar el propósito elegido.

HONESTOS SONETOS-TURBIA REALIDAD

 

TURBIA REALIDAD.

 

 

 

En muchas ocasiones, la mentira de unos,

acaba siendo la verdad para otros,

gracias a los engaños oportunos,

surge el enfrentamiento entre nosotros.

 

Si no se distingue lo falso de lo cierto

resulta difícil elegir el camino correcto,

dejando al timador el campo abierto

para construir su relato perfecto.

 

Sin recibir una información fiable,

fácilmente se impone un embuste

con apariencia de veracidad viable.

 

Lejos de arreglarse el desbarajuste,

la manipulación permanece estable

realizando algún que otro reajuste.

HONESTOS SONETOS- LA VENTA DE PRINCIPIOS

 

LA VENTA DE PRINCIPIOS.

 

 

La libertad se pierde poco a poco

al acatar cualquier inmundicia,

para evitar que te llamen loco,

por luchar en contra de la injusticia.

 

La sociedad somete a ese trastorno

aceptando inmorales privilegios,

casi todos cobran el pequeño soborno,

mientras ignoran posibles sacrilegios.

 

Resulta muy fácil caer en la escusa,

y convertirse en esclavo del sistema

cuando el librepensamiento no se usa.

 

Nadie tiene la capacidad suprema

de imponer una ideología confusa,

cada uno debe crear su propio esquema.

HONESTOS SONETOS- LOS VALORES PERDIDOS

 LOS VALORES PERDIDOS.

 

 

 

El hombre siente auténtica necesidad

por todo aquello que no sirve para nada,

olvidando su verdadera identidad

debajo de una realidad distorsionada.

 

Venera el dinero como a una religión

rezando a dioses y santos economistas,

la abundancia monetaria es una bendición,

ser pobre un pecado de gentes laicistas.

 

La fe en el aumento de patrimonio

condena al infierno a los manirrotos,

al malgastar tentados por el demonio.

 

Acumulan bienes los fieles devotos

creyendo transmitir un gran testimonio,

pero solo dejan cientos de corazones rotos

HONESTOS SONETOS- LA SINCERIDAD MAL ENTENDIDA

 

LA SINCERIDAD MAL ENTENDIDA.

 

 

 

Aquellos que dicen no haber mentido

suelen ser los principales mentirosos,

una realidad que cobra cierto sentido

al conocer sus prejuicios maliciosos.

 

Todo el mundo tiene un lado oculto,

y negarlo es faltar a la verdad,

incluso hay quien llega al insulto

para encubrir una autentica falsedad.

 

Resulta imposible ser siempre sincero,

más aun, si uno mismo se engaña

persiguiendo el éxito por dinero.

 

No asumir que la farsa a veces empaña

un sueño, que puede parecer verdadero,

acaba siendo el fruto de una artimaña.

HONESTOS SONETOS- LA LIBERTAD CONFESA

 

LA LIBERTAD CONFESA.

 

 

 

Ser libre rodeado de barreras,

tanto físicas, como psicológicas,

es una ilusión que agita banderas,

ocultando falsedades ideológicas.

 

La auténtica libertad no se vende,

ni se compra con actos partidarios,

cuando cualquier poder la suspende,

no deberían existir adversarios.

 

La falta de unidad en su defensa

provoca una inquietante esclavitud,

que para muchos es más intensa.

 

Resulta raro considerar una virtud,

no poder decir aquello que se piensa,

ni hacer nada con total plenitud.

HONESTOS SONETOS- NACIONALIDAD ELECTA

 

NACIONALIDAD ELECTA.

 

 

 

La patria, es ese rincón en el mundo

al que uno siente que pertenece,

sin la necesidad de ser oriundo,

simplemente porque le apetece.

 

Algunos nacen en el lugar equivocado,

y terminan odiando sus orígenes,

un error muchas veces perpetuado

por la imposición de ritos aborígenes.

 

Para aquellos que buscan encajar

existen otras culturas por conocer,

con diferentes maneras de vivir.

 

Aunque no todos son libres para decidir

el sitio donde quieren permanecer,

ni tienen la posibilidad de viajar.

HONESTOS SONETOS- SENTIDO DEL HUMOR

 

SENTIDO DEL HUMOR.

 

 

 

Todos aquellos que viven muy deprisa,

tomándose la vida demasiado en serio,

ignoran los beneficios de la risa

cuando el humor impone su criterio,

 

provoca el olvido en un momento triste

impulsando una recomendable alegría,

aunque no siempre es posible el chiste,

realizar un intento aumenta la energía,

 

eleva la moral con mucha diplomacia,

pues una carcajada a nadie desanima,

en esto tiene más que probada eficacia.

 

Una vez conseguido ganar autoestima,

cualquier problema puede hacer gracia,

incluso aquel que antes daba grima.

HONESTOS SONETOS- EL EXITO DEL FRACASADO

 

EL ÉXITO DEL FRACASADO.

 

 

 

Convertir a un héroe en villano

es como pasar del amor al odio,

una característica del ser humano

si alguien sube a lo alto del podio.

 

Mientras todos vitorean al campeón,

la envidia hace acto de presencia,

nadie quiere sentirse un simple peón,

los aplausos solo son de apariencia.

 

La admiración por los triunfadores,

dura el tiempo imprescindible

para hallar a sus peores depredadores,

 

una vez derribado el mito invencible,

los mediocres aspiran a ser mejores

comparados con un ganador discutible.

HONESTOS SONETOS- LA DEBILIDAD VOLUNTARIA

 

LA DEBILIDAD VOLUNTARIA.

 

 

 

Detrás de algo aparentemente frágil,

muchas veces hay una gran fortaleza,

escondida de manera muy ágil

gracias a una inteligente sutileza.

 

Mostrar debilidad puede ser una argucia,

para disimular una fuerza que asusta,

es bueno alejar ese temor con astucia,

aunque se posea una firmeza robusta.

 

Cuando el poder no se quiere ejercer,

aun teniendo las aptitudes necesarias,

pasar desapercibidos, es de agradecer.

 

Existen personas extraordinarias

que solo intentar permanecer

al margen de actividades sectarias.

HONESTOS SONETOS-UNA MALA OPCION

 

UNA MALA OPCION.

 

 

 

La capacidad para recordar estupideces,

en algunos, puede llegar a ser infinita,

pues comparten memoria con los peces,

olvidando a una velocidad inaudita.

 

Para aquellos que manejan más retentiva,

y una inteligencia de cierta categoría,

lo mejor sería tener alguna iniciativa

que evite el almacenaje de la tontería.

 

Llenar la mente de temas insensatos

solo conduce a un futuro desatino,

alejado de un pensamiento racional.

 

Cuando la idiotez es algo opcional

a la hora de escoger un destino,

seguro que no le faltan candidatos.

HONESTOS SONETOS- EL CENTRO EQUILIBRADO

 

EL CENTRO EQUILIBRADO.

 

 

 

Los extremos nunca fueron buenos

pues se alejan de la moderación,

no mantienen los ánimos serenos,

saltando ante cualquier provocación.

 

Ninguna solución extremista

favorece a la mayoría del conjunto,

la imparcialidad salta a la vista

al ver diferente el mismo asunto.

 

Permanecer dentro de unos valores

forma parte de un catálogo,

de aquellos que buscan un acuerdo.

 

Tener en cuenta algunos factores,

como estar en constante dialogo,

evita comenzar con el pie izquierdo.

HONESTOS SONETOS- SIN DARNOS CUENTA

 

SIN DARNOS CUENTA.

 

 

 

Vivimos con el miedo a morirnos,

y la muerte nos llega sin haber vivido,

preocupados por lo que puedan decirnos,

no percibimos el tiempo perdido,

 

solo cuando se aproxima el final

somos conscientes de esta circunstancia,

a punto de cerrar el ciclo vital

todo parece tener escasa importancia.

 

Obsesionados por el fallecimiento

la existencia pasa de manera fugaz,

olvidándonos disfrutar el momento.

 

Si se carece de una visión audaz

es posible acabar como alimento

de un monstruo con apetito voraz.