EL
TIMO DE UNA CASADA
A
los quince días que le dura la regla
se
suman las noches del dolor de cabeza,
para
ella con el sexo nada se arregla
solo
pensar en ello le produce pereza;
nada
de todo esto se podía presagiar
antes
de firmar el acta matrimonial,
ya
después de festejar el ceremonial
llego
a su entrepierna, el frío glaciar,
lo
que hasta aquel día fue ternura
a
partir de ahora sera vil chantaje,
si
a fin de mes no paga la factura,
en
la puerta encontrara el equipaje,
ella
no puede pasar sin la manicura
ni
descuidar, el color del maquillaje.
Toca
gimnasio tres veces por semana,
cafetería
todos los días por la tarde
comentando
la aventura mas cercana,
con
las amigas hay que hacer alarde.
Encima
pretende para su aniversario
como
regalo un brillante diamante,
para
este fin utiliza como excusa,
que
ella de las tarjetas no abusa,
insinuando,
que él tiene una amante
cuando
en realidad es al contrario.
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